Ansiedad y cuerpo: señales que no debes ignorar

Tu cuerpo te habla, aunque a veces no sepas qué te está diciendo.

La ansiedad no solo vive en la mente. También se manifiesta en el cuerpo: tensión constante, problemas digestivos, cansancio sin causa aparente, insomnio, respiración entrecortada… Son señales que muchas veces normalizas, pero que indican que algo necesita ser atendido.

Ignorar el cuerpo es negar una parte esencial del proceso emocional. Aprender a escucharlo no significa obsesionarte con cada síntoma, sino empezar a reconocer cómo te afecta lo que vives. Si cada día arrastras malestar físico sin una causa médica clara, puede ser el momento de mirar hacia dentro.

En terapia, trabajamos para reconectar con el cuerpo, entender el mensaje detrás del síntoma y recuperar equilibrio. Si tu cuerpo habla, merece ser escuchado.

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